por Fernando Flores
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20 de junio de 2025
En México, la red de cajeros automáticos se ha convertido en un elemento esencial para la vida cotidiana de millones de personas. Más allá de las sucursales y oficinas tradicionales, los cajeros permiten acceder a dinero en efectivo, realizar consultas, pagar servicios y hacer transferencias de manera fácil y segura, las 24 horas del día. Esta infraestructura ha evolucionado para ser cada vez más amplia y accesible, conectando tanto grandes ciudades como comunidades pequeñas o rurales. Uno de los avances más notables en el sistema financiero mexicano ha sido la creación de la Multired de cajeros automáticos . A través de esta red interconectada, las personas pueden usar su tarjeta para retirar dinero o realizar operaciones en prácticamente cualquier cajero, sin importar la institución emisora de la tarjeta. Este modelo ha reducido las barreras de acceso, eliminando la dependencia exclusiva de una sola marca de cajero y permitiendo mayor movilidad para los usuarios y evitando las comisiones que cobran los bancos. La multired ha mejorado la experiencia de los usuarios, ya que les ofrece flexibilidad para elegir el cajero que esté más cercano, seguro o conveniente según su ubicación. Además, la colaboración entre distintas instituciones ha impulsado la modernización de los servicios: hoy es común encontrar cajeros que permiten depósitos, pago de servicios, recargas telefónicas y transferencias entre cuentas, agilizando trámites que antes requerían filas en ventanilla. No obstante, el uso de la multired también implica considerar las comisiones que pueden variar dependiendo del acuerdo entre las entidades emisoras y la red utilizada. Por ello, es recomendable revisar los términos de uso y planificar las operaciones para optimizar los costos y aprovechar al máximo la flexibilidad que ofrece este sistema. La multired de cajeros automáticos, en suma, ha sido clave para impulsar la inclusión financiera y facilitar el acceso a servicios bancarios en todo el país.